Me juraste idolatrar
con firme constancia en suma
y fue tu amor cual espuma
que forma el viento en el mar.
Al no tener tus primicias
de doncella inmaculada
me diste una puñalada
que por poco me desquicias.
Besos ni falsas caricias
no deseo contratar,
tú supiste retratar
en tu cara la pasión
y en un rapto de emoción
me juraste idolatrar.
Tú has golpeado, yo he caído
y me cuesta levantarme
¿cómo has podido humillarme
si yo siempre te he querido?
Con tus vientos has traído
de felonía una bruma
y veo cómo se esfuma
todo lo tuyo mujer
que me ofreciste querer
con firme constancia en suma.
De tu mofa a la sazón
voy pagando el alto precio
mas dejo de ser un necio
y voy entrando en razón.
El dolor de corazón
saco a través de la pluma,
tu falsía es lo que abruma
y me causa resquemor
fingiste un sólido amor
y fue tu amor cual espuma.
Te jactas de haber ganado
y yo te digo que ¡no!
después de todo, fui yo
quien no cometió el pecado.
Tu perfidia me ha enseñado
cómo es tu forma de amar,
tu amor visto del palmar
y en una tarde de brujas
es un grupo de burbujas
que forma el viento en el mar.
* planta de la décima “El amante despreciado” del Cucalambé.
© 2007 Luis Bárcena Giménez
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