La décima juzga a solas
el palpitar de un instante.
La décima impregna amante
sus fábulas sobre las olas.
De los momentos adversos
que a diario vienen con mofa
yo me refugio en la estrofa
que tiene diez universos.
Si orquídeas no son mis versos
son entonces amapolas,
no me deslumbran aureolas
de los vates con linaje
porque mi humano mensaje
la décima juzga a solas.
Humilde a ella acudí
con cielo rojo tormenta
y la décima contenta
me dio el cielo azul turquí.
Ella sabe que es por mí
que saco un verso adelante
de cercanía, distante
respetuoso, irreverente
y que es de modo elocuente
el palpitar de un instante.
Y entre las estrofas bellas
de la expresión castellana
se yergue en la soberana
de varones y doncellas.
La componen diez estrellas
cada cual siempre brillante,
con diez versos, insinuante
va mostrándonos su enigma
y su poético estigma
la décima brinda amante.
Aborda temas jocosos
humanos y espirituales
y en relaciones sociales
toca asuntos espinosos.
Y sus versos amorosos
pueden más que las pistolas,
guajiras y barcarolas
sus melodías le allegan
y en mar de vida navegan
sus fábulas sobre las olas.
* planta de Luis Gómez
(Controversia Imaginaria p. 17)
© 2005 Luis Bárcena Giménez
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